Los diagnósticos de enfermería de la taxonomía NANDA son herramientas fundamentales para proveer cuidado a pacientes con enfermedades crónicas. El diagnóstico de enfermería es una herramienta fundamental para detectar los problemas de salud, identificar el necesidades del paciente y tratar problemas crónicos. El uso adecuado de este tipo de herramientas es fundamental en el cuidado de pacientes con enfermedad renal crónica.
Índice
Introducción
Los Diagnósticos de Enfermería ayudan a los enfermeros/as a preparar planes de cuidado individualizados para pacientes con enfermedad renal crónica. Esta información permite al enfermero/a ofrecer cuidados individualizados y mejorar la calidad de vida de los pacientes. Además, los diagnósticos de enfermería contribuyen a la formulación de planes de tratamiento más eficaces, reduciendo los costes asociados. Conocer los diagnósticos de enfermería relacionados con la enfermedad renal crónica es, por lo tanto, una habilidad fundamental para los profesionales de enfermería.
Los diagnósticos de enfermería contribuyen a la tendencia hacia un enfoque centrado en el paciente promoviendo la autonomía del paciente y estimulando una mayor responsabilidad compartida. Estas herramientas tienen un impacto positivo en el tratamiento y los resultados clínicos asociados con la enfermedad renal crónica. Este artículo explora la naturaleza de la enfermedad renal crónica, los síntomas, la prevención y la importancia de los diagnósticos de enfermería para mejorar el cuidado de los pacientes.
¿Qué es la enfermedad renal crónica?
La enfermedad renal crónica (ERC) se refiere a un grado de lesión renal que se extiende durante meses o años. También se denomina insuficiencia renal crónica. Esta patología es una de las principales causas de muerte en todo el mundo, especialmente debido a sus complicaciones cardíacas. La enfermedad renal crónica es una condición irreversible en la que los riñones perdieron su capacidad de funcionar normalmente. Aunque hay varias posibles causa, los pacientes con esta afección pueden llegar a desarrollar complicaciones a largo plazo, como insuficiencia renal, hipertensión arterial, enfermedades cardíacas, etc.
El tratamiento de la enfermedad renal crónica puede incluir recomendaciones de estilo de vida como una dieta balanceada, control y tratamiento de la hipertensión arterial y control de los niveles de glucosa en sangre. Las recomendaciones también incluyen terapia con fármacos, diálisis peritoneal y, a veces, hasta un transplante de órgano. La atención de los enfermeros es importante para ayudar a los pacientes a gestionar esta afección.
¿Cuáles son los síntomas de la enfermedad renal crónica?
Los síntomas de la enfermedad renal crónica suelen ser sutiles y dificiles de detectar. Esto significa que muchos pacientes no reciben un diagnóstico inmediato. Los síntomas más comunes de la enfermedad renal crónica incluyen anemia, hinchazón en las extremidades, pérdida de apetito, mal aliento, náuseas, cansancio, dolores de espalda inferiores, problemas con la concentración, debilidad muscular y cambios en el color de la orina. Algunos pacientes también pueden experimentar picazón o qeuitrida.
Además, los pacientes con enfermedad renal crónica también pueden desarrollar complicaciones, como hipertensión arterial, insuficiencia renal, arritmias cardíacas y enfermedades cardiovasculares. Es importante que los enfermeros identifiquen temprano los síntomas de la enfermedad renal crónica para ayudar al paciente a controlar la afección.
¿Cuáles son las causas de la enfermedad renal crónica?
Existen varias causas posibles de la enfermedad renal crónica. Estas incluyen diabetes mellitus, hipertensión arterial, e historia familiar de enfermedad renal crónica. También existen otros factores de riesgo, como el tabaquismo, la obesidad y la edad avanzada. En algunos casos, una infección, una enfermedad autoinmune o una lesión pueden contribuir a la aparición de la enfermedad renal crónica.
Los enfermeros deben comprender y buscar factores de riesgo para la enfermedad renal crónica. Deben hacer recomendaciones apropiadas para ayudar a los pacientes a reducir o controlar estos factores, lo que puede disminuir el riesgo de desarrollar esta afección.
¿Cuáles son los factores de riesgo de la enfermedad renal crónica?
Existen varios factores de riesgo para la enfermedad renal crónica. Estos incluyen diabetes mellitus, hipertensión arterial, sobrepeso u obesidad, uso excesivo de alcohol, antecedentes familiares de enfermedad renal crónica, edad avanzada, tabaquismo, embarazos múltiples, enfermedades autoinmunes, entre otros. Los enfermeros deben evaluar estos factores de riesgo en los pacientes y decidir si se requieren cambios en los hábitos de vida o tratamientos médicos.
Además, los enfermeros deben tener en cuenta el riesgo cardiovascular en los pacientes con enfermedad renal crónica. Estos pacientes son particularmente vulnerables a desarrollar enfermedades cardiovasculares debido a la progresión de la enfermedad renal crónica. Esto puede incluir enfermedades coronarias, arritmias cardíacas, miocardiopatías y accidentes cerebrovasculares. Por ello, los enfermeros deben verificar los factores de riesgo cardiovascular y hacer recomendaciones de modificación de estilos de vida adecuadas.
¿Cómo prevenir la enfermedad renal crónica?
La prevención primaria es una estrategia valiosa para reducir el riesgo de enfermedad renal crónica. Esto puede incluir cambios en el estilo de vida, como llevar una dieta saludable, dejar de fumar,controlar el peso, ejercicio regular y limitar el consumo de alcohol. Los enfermeros también deben contribuir al control de factores de riesgo primarios, como la diabetes y la hipertensión, mediante la educación del paciente.
Además, los enfermeros deben evaluar a los pacientes para detectar los primeros signos de enfermedad renal crónica. El diagnóstico temprano y la identificación de los factores de riesgo en los pacientes pueden ayudar a prevenir la progresión de esta afección. Además, los enfermeros también deben verificar los resultados de los exámenes clínicos y los niveles de laboratorio para detectar la enfermedad renal crónica de manera temprana.
Importancia del uso adecuado de los diagnósticos enfermeros para mejorar el cuidado de los pacientes con enfermedad renal crónica
Los diagnósticos de enfermería son de gran importancia para el cuidado de los pacientes con enfermedad renal crónica. Los diagnósticos de enfermería recogen información detallada sobre los problemas de salud del paciente, lo que ayuda a los enfermeros/as a identificar la necesidades del paciente y planear con mayor precisión el tratamiento. La recolección de datos clínicos es un paso importante para fomentar la autonomía del paciente y promover una mayor responsabilidad compartida.
Los diagnósticos de enfermería también proporcionan información sobre los resultados deseados para el paciente, lo que permite a los enfermeros/as adaptar el plan de tratamiento en consecuencia. Esto puede contribuir a mejorar la calidad de vida de los pacientes con enfermedad renal crónica y reducir los costes asociados con el tratamiento farmacológico a largo plazo. El uso adecuado de los diagnósticos de enfermería es fundamental para mejorar la calidad de vida y los resultados clínicos de los pacientes con enfermedad renal crónica.
Diagnósticos de Enfermería NANDA para enfermedad renal crónica
1. Alteración de la Función Renal
Valoración: Verificar los datos básicos del paciente como: historia clínica, exámen físico, hemograma completo, biometría, estudios de función renal, uso de medicamentos y/o substancias tóxicas.
Diagnóstico: Alteración de la Función Renal Secundario a la enfermedad crónica.
Planeación: Establecer un tratamiento apropiado para prevenir complicaciones derivadas de la enfermedad, reducir la “síndrome hiperhidratante” y prevenir la toxicidad renal, así como inducir el transporte renal adecuado.
Ejecución/Intervención: Administrar medidas de higiene bucal, instalación de líquidos intravenosos, con diuréticos, para reducir la “síndrome hiperhidratante”. Administración de heparina para prevenir la formación de coágulos. La dieta debe contener alimentos de bajo contenido en nitrógeno. Administración de líquidos según balance hídrico del paciente.
Evaluación: Evaluar los signos y síntomas del paciente así como los para verificar toxicidad renal, balance hídrico, controlar los niveles de nitrógeno, creatinina, urea. Establecer suelos de evaluación para el tratamiento recibido.
2. Riesgo de Insuficiencia Cardiaca Congestiva
Valoración: Verificar historia clínica, antecedentes familiares, exámenes de laboratorio, exámenes paraclínicos con signos vitales y diuresis.
Diagnóstico: Riesgo de Insuficiencia Cardiaca Congestiva secundaria a la Enfermedad Renal.
Planeación: Establecer un plan de prevención para la insuficiencia cardíaca congestiva, restringir el uso de fluidos en caso contrario optimizando el umbral de diuresis, y prevenir y/o tratar el resto de complicaciones asociadas.
Ejecución/Intervención: Administrar medidas de higiene bucal, instalación de líquidos intravenosos, dieta con pobre contenido en líquidos, monitorear los signos vitales, resultados de laboratorio, pruebas de imagen, posibilidad de instalación de endoprótesis, dar indicaciones para mantener un peso adecuado.
Evaluación: Monitorear los resultados de los exámenes de laboratorio para el monitoreo de los signos vitales y diuresis del paciente, uso de líquidos para prevenir la Insuficiencia Cardiaca Congestiva, respuesta al tratamiento recibido, y control de las complicaciones asociadas.
3. Déficit de Nutrición: Proteínas
Valoración: Verificar los datos básicos relacionados a ingresar calórico y nutricional en la alimentación normal, yadición de proteínas y minerales especiales, consumo actual de líquidos, etc.
Diagnóstico: Déficit de Nutrición: Proteínas Secundario a la Enfermedad Renal Crónica.
Planeación: Establecer una dieta adecuada para mejorar el aporte de proteínas y minerales, y mejorar la nutrición del paciente. Evitar la acidosis y prevenir y/o tratar las complicaciones asociadas.
Ejecución/Intervención: Administración de una dieta con alimentos ricos en proteínas con cantidades bajas de líquidos para prevenir la acidosis. Administración de suplementos con proteínas de alta calidad dosage que sea adecuado para cada paciente. Control del consumo de alimentos ricos en potasio.
Evaluación: evaluar los signos y síntomas clínicos en los resultados del paciente, sus saturaciones ponderales, los exámenes de laboratorio para medir el contenido adecuado de proteinas, el balance hídrico y los medicamentos usados para prevenir y/o tratar la acidosis.
4. Disminución de Acidez Corporal
Valoración: Verificar historia clínica, exámen físico, pruebas de laboratorio, medicamentos actualmente administrados, patrón de osmolaridad y sedimento urinario.
Diagnóstico: Disminución de la Acidez Corporal secundario a fallo renal.
Planeación: Establecer un plan de manejo para restaurar la acidez corporal al nivel normal, preservar el estado de hidratación, así como prevenir y/o tratar las complicaciones asociadas.
Ejecución/Intervención: Administración de medicamentos adecuados para acidificación urinaria y ajuste de pH, si corresponde. Restringir el uso de líquidos según el balance hídrico del paciente. Establecer una dieta correcta con alimentos ricos en líquidos indicados para el paciente. Control de los electrolitos para evitar desequilibrios.
Evaluación: Evaluar los exámenes de laboratorio para controlar el PH y anión gap urinario y sérico, controlar los electrolitos, asegurar un balance hídrico y registrar la respuesta al tratamiento recibido.
5. Alteraciones en las Habilidades Cognitivas
Valoración: Verificar historial psiquiátrico, exámenes de laboratorio, recuento de glóbulos rojos, la detección de marcadores inflamatorios, nivel de hemoglobina, deficiencias nutricionales, examenes de la función renal.
Diagnóstico: Alteraciones en las Habilidades Cognitivas secundarias a la Enfermedad Renal.
Planeación: Establecer el riesgo de enfermedad y desarrollar un plan a largo plazo para disminuir los efectos adversos en el desempeño cognitivo y prevenir y/o tratar a las complicaciones asociadas.
Ejecución/Intervención: Administración de tratamiento farmacológico adecuado para restaurar la función cognitiva alterada. Régimen nutricional para disminuir los efectos nocivos en el desempeño cognitivo. Administración de tratamientos para el anemia, controlar los niveles de azufre, zinc y hierro.
Evaluación: Medir el nivel de actividad y alertas del paciente, los resultados de los exámenes de laboratorio, el balance hídrico, el grado de cognición y la respuesta al tratamiento recibido.
Preguntas frecuentes acerca de los diagnósticos de enfermería NANDA para la Enfermedad Renal Crónica:
¿Qué son los diagnósticos de enfermería NANDA?
Los diagnósticos de enfermería NANDA son un conjunto de definiciones estandarizadas que describen conceptos de enfermería, los cuales son parte de un sistema de clasificación que se utiliza para identificar problemas de salud.
¿Cuáles son los beneficios de los diagnósticos de enfermería NANDA?
Los diagnósticos de enfermería NANDA ayudan a los profesionales de enfermería al facilitar la comunicación acerca de los problemas de salud, mejorando así la idea general de los planes de tratamiento recomendados. Además, ayudan a que el personal médico pueda ser más objetivo al describir los problemas de salud y especificar los resultados esperados.
¿Cuáles son los diagnósticos de enfermería NANDA para la Enfermedad Renal Crónica?
Los diagnósticos de enfermería NANDA para la Enfermedad Renal Crónica incluyen Riesgo de Insuficiencia Renal, Riesgo de Desequilibrio Hídrico, Riesgo de Desequilibrio Nutricional: Ingesta Inadecuada, Disminución de Volumen de Orina e Infección Por Eliminación Urinaria.
¿Quién puede utilizar los diagnósticos de enfermería NANDA?
Los diagnósticos de enfermería NANDA están disponibles para ser utilizados por cualquier profesional de enfermería, según la situación presentada.
¿Cómo son diferenciados los diagnósticos de enfermería NANDA?
Aunque el sistema de clasificación NANDA para la Enfermedad Renal Crónica solo cuenta con cinco diagnósticos estandarizados, estos pueden ser divididos y clasificados de acuerdo a la etapa de la enfermedad en la que se encuentre el paciente, ayudando así a una mejor comprensión del problema.