Índice
Introducción
La atención en salud está evolucionando y mejorando constantemente, permitiendo un estándar cada vez más alto para el cuidado de los pacientes. En particular, los diagnósticos de enfermería juegan un papel importante en el diagnóstico, tratamiento y seguimiento de las condiciones médicas relacionadas con el seguimiento post-hospitalización. Esta guía cubre las inscripciones relevantes de NANDA (Diagnóstico de Enfermería Nomenclatura y Clasificación) para pacientes que presentan convulsiones. Ofrece información sobre cómo desarrollar procesos de seguimiento del tema con efectividad, aumentando la oportunidad de obtener el mejor resultado final para el paciente.
A través de esta publicación, explicaremos las convulsiones, los síntomas, las causas, los factores de riesgo y la forma de prevenirlas. Al final, hablaremos de la importancia de un buen uso de los diagnósticos de enfermería para mejorar el cuidado de los pacientes con este tipo de patología.
¿Qué son las convulsiones?
Las convulsiones son desórdenes neurológicos transitorios, caracterizados por descargas nerviosas no controladas en el cerebro, lo que lleva a síntomas físicos y mentales visuales. Varios tipos de convulsiones se clasifican como epilepsia. Algunos ejemplos comunes de convulsiones son las convulsiones parciales complejas, las convulsiones generalizadas, las convulsiones infantiles y las convulsiones apneicotónicas.
Las convulsiones no son ni una enfermedad ni un trastorno mental. Pueden ser el resultado de anormalidades estructurales cerebrales, lesiones cerebrales, distintos trastornos metabólicos, enfermedades infecciosas, tumores cerebrales, intoxicaciones y trastornos psicológicos. Generalmente, las convulsiones son diagnosticadas correctamente con pruebas de diagnóstico, como el electroencefalograma y el examen neurológico exhaustivo.
¿Cuáles son los sintomas de las convulsiones?
Los síntomas de convulsión varían en muchas personas e incluyen: envolturas musculares repentinas; perder el conocimiento o tener una sensación extraña;périda temporal de tono muscular pero aún controlar los movimientos cuerpo; salivación excesiva; dificultad para respirar; cambios de comportamiento; confusión y desorientación; sensibilidad facial; pérdida de control de los esfínteres; mareos; movimientos oculares rápidos; movimientos corporales descoordinados y espasmos musculares.
Además, las convulsiones pueden acompañarse de síntomas psíquicos, como alucinaciones, ideas erráticas y habla incoherente. Las convulsiones pueden durar desde unos pocos segundos hasta unos minutos. Una sola convulsión no suele causar graves problemas de salud.
¿Cuáles son las causas de las convulsiones?
Las causas de las convulsiones son variadas y dependen de la fuente de descarga eléctrica en el cerebro. Estas pueden ser causadas por un breve suministro de oxígeno al cerebro, problemas metabólicos graves (electrolitos), daño cerebral, alcoholismo, ingestión de drogas o lesiones craneales debidas a una enfermedad o lesión cerebral previas. Otros factores contribuyentes pueden ser el abuso de drogas, enfermedades infecciosas, traumatismos cráneoencefálicos, daño cerebral in utero, enfermedades psicológicas, accidentes cerebrales isquémicos, daños en la corteza temporal y algunos tipos de tumor cerebral.
Algunas formas de convulsiones pueden ser hereditarias, esto significa que el gen predispuesto afecta a un miembro de la familia y se transmite a las generaciones siguientes. Si hay alguna historia de convulsiones en la familia, los bebés, los niños pequeños y los ancianos deben ser monitoreados para identificar y tratar esta enfermedad a tiempo.
¿Cuáles son los factores de riesgo de las convulsiones?
Existen factores de riesgo para desarrollar convulsiones, como edad (generalmente entre los 30 y los 60 años de edad), herencia o historia familiar de convulsiones, enfermedades en el desarrollo, traumatismo craneal, uso indebido de alcohol u otras drogas y enfermedades infecciosas tales como el sarampión, la meningitis y el dengue. En algunos casos, los fármacos recetados para tratar trastornos psiquiátricos, hipertensión arterial y migraña también pueden contribuir a las convulsiones.
Algunas enfermedades crónicas como el Síndrome de Sjogren, la amigdalitis crónica y la enfermedad de Ménière también pueden aumentar el riesgo de presentar convulsiones. Los problemas en el desarrollo cerebral después de los 30 años de edad son un factor de riesgo para las convulsiones en adultos, además de problemas renales, pulmonares, metabólicos y tiroideos.
¿Cómo prevenir las convulsiones?
Las mejores formas de prevención para las convulsiones son identificar y tratar a tiempo cualquier enfermedad subyacente, evitar el abuso de drogas y alcohol, controlar la presión arterial, reducir la inflamación al asegurar una nutrición adecuada, hacer ejercicio regular, dormir suficiente, tener descansos regulares y realizar los exámenes médicos necesarios.
Cuando el problema es hereditario, llevar un estilo de vida saludable y equilibrado es la mejor manera de prevenir o reducir la probabilidad de presentar una convulsión. Algunas veces, los medicamentos anticonvulsivos o antiepilépticos se prescriben para prevenir la aparición de convulsiones en personas con alto riesgo de recurrencia.
Importancia del uso adecuado de los diagnósticos enfermeros para mejorar el cuidado de los pacientes con convulsiones
Los diagnósticos de enfermería tienen un papel fundamental en el cuidado de los pacientes con convulsiones, ya que requieren diagnóstico preciso, control post-hospitalización y medidas efectivas de prevención de complicaciones. Los diagnósticos de enfermería proporcionan información pertinente que ayuda a proveedores de atención médica y administrativos a crear planes de atención eficaces.
Los diagnósticos de enfermería también ayudan a identificar y controlar los síntomas y comportamientos relacionados con las convulsiones, mejorar la calidad de la atención de los pacientes y desarrollar planes de atención bien estructurados para mejorar el pronóstico para los pacientes. El uso adecuado de los diagnósticos de enfermería sirve como herramienta para proveer una atención holística a los pacientes con convulsiones, así como para prevenir complicaciones a corto y largo plazo.
Listado de Diagnósticos de enfermería NANDA y planes de atención para el tratamiento de pacientes con convulsiones
Riesgo de tubo endotraqueale y desequilibrio Nutricional: *ingesta calórica inadecuada. *desnutrición
Plan de atención:
- Realizar una valoración nutricional para determinar posibles alteraciones nutricionales.
- Colocación de tubos endotraqueales para evacuar secreciones respiratorias en caso de que se presenten.
- Administrar la alimentación prescrita por el médico.
- Educar al paciente y a sus familiares sobre una dieta saludable.
- Monitorizar los signos vitales del paciente para verificar su estado físico.
Riesgo de alteración de control autónomo muscular, movimiento involuntario
Plan de atención:
- Evaluación de la frecuencia, duración, tipo, intensidad y localización de las convulsiones.
- Aplicar la terapia adecuada de acuerdo al caso clínico.
- Evaluar si se presentan efectos secundarios o complicaciones.
- Controlar los niveles de oxigeno en sangre.
- Adminstrar líquidos para mantener la hidratación adecuada.
- Realizar examen neurológico.
Riesgo de lesión debido a movimiento y actividades físicas no coordinadas
Plan de atención:
- Mantener al paciente estable para evitar lesiones.
- Mantener al paciente en una zona segura.
- Brindar suficiente espacio para realizar actividades físicas.
- Favorecer el aseo corporal con el materíal adecuado.
- Realizar actividades recreativas.
Riesgo de alteración de la estructura y la función del sistema nervioso
Plan de atención:
- Manutención estricta de medicación previamente prescrita.
- Mantener una adecuada posición corporal.
- Administración de líquidos.
- Administración de líquidos oralmente.
- Evaluar el estado de los reflejos.
- Prescribir analgésicos si la situación lo amerita.
Riesgo de alteración en el patrón de sueño
Plan de atención:
- Mantener un horario de sueño con unas 12 horas de descanso.
- Limitar la ingesta de medicamentos que nos pudieran alterar el sueño.
- Realizar actividades relajantes antes de acostarse.
- No ingiar sustancias excitantes.
- No consumir alimentos con contenido de cafeína cerca de la hora de dormir.
- No realizar ejercicio excesivoc cerca de la hora de dormir.
Preguntas frecuentes
¿Qué son los diagnósticos de enfermería?
Los diagnósticos de Enfermería son diagnósticos específicos que se recopilan para la práctica de la enfermería para establecer los objetivos, planes de cuidados y valoración de la salud de un paciente.
¿Cuáles son los diagnósticos de enfermería NANDA para convulsiones?
Los diagnósticos de enfermería NANDA para convulsiones son los siguientes:
- Riesgo de lesión.
- Déficit de conocimiento en materia de convulsiones.
- Disminución de la fuerza muscular.
- Falta de equilibrio nutricional.
- Ansiedad relacionada con el evento de la crisis.
¿Cuál es el resultado previsto para los diagnósticos de enfermería NANDA?
Los resultados previstos para la aplicación de los diagnósticos de enfermería NANDA para convulsiones son:
- Aumento del conocimiento sobre la condición.
- Aumento de la fuerza muscular.
- Equilibrio nutricional adecuado.
- Disminución del riesgo de lesiones.
- Reducción de la ansiedad relacionada con la crisis.
¿Cuáles son los principales problemas relacionados con las convulsiones?
Los principales problemas relacionados con las convulsiones son:
- Daños neurológicos.
- Daños físicos.
- Problemas para dormir.
- Problemas para hablar.
- Problemas para hablar.
- Problemas comportamentales y psicológicos.
¿Cómo se plantean los objetivos de enfermería para pacientes con convulsiones?
Los objetivos de enfermería para pacientes con convulsiones están relacionados con mantenerse sano y seguro, mejorar los síntomas relacionados con la enfermedad, prevenir o minimizar cualquier daño médico o emocional, reducir el número de crisis, controlar los factores desencadenantes, controlar los medicamentos y promover el autocuidado.
¿Cómo puedo ayudar a alguien que sufre de una convulsión?
Para ayudar a alguien que sufre de una convulsión, debes asegurarte de mantenerte calmado. Proporcione al paciente un espacio seguro y cómodo para evitar lesiones por caídas. No intente sujetar al paciente, trate de alinear la cabeza y sujetar la lengua. No le administre medicamentos, agua ni gasa. Llame al servicio de emergencias cuando la convulsión cese o si dura más de 5 minutos.